Mediocres, S.A.

Sociedad Mediocre
Sociedad Mediocre

Un país con dirigentes mediocres sólo puede generar una sociedad mediocre. Ahí es hacia donde nos dirigimos cogiendo velocidad conforme el tiempo pasa y nuevas leyes, normas y estupideces varias van apareciendo. Este gobierno es mediocre. El anterior también lo fue y sospecho que el próximo también lo será. Y mientras tanto, Botín más rico y usted más pobre. Curiosa coincidencia, ¿verdad?.

Ayer me contaron que el [des]gobierno prepara una «Ley de fomento de la Financiación Empresarial» que entre otras cosas regulará el crowdfunding. Es que no falla: algo empieza a funcionar y llega el gobierno de turno a meter la mano y estropearlo. El crowdfunding surge en Estados Unidos como solución a la financiación privada de proyectos a base de micro aportaciones. De este modo, si uno tiene una buena idea puede explicarla en una web y presentar su plan de negocio y cualquiera que pase por allí puede hacer su aportación para financiar su proyecto. A cambio, se lleva lo que ofrezca el emprendedor.

La idea es sencilla: si no tienes nada más que una buena idea, y quieres ponerla en marcha rápido, convence a los curiosos de que la idea es buena y ellos te la financiarán. Con ello, un emprendedor evitaba, por ejemplo, tener que jugarse su casa para lanzar un proyecto. Si el proyecto no funcionaba, nadie perdía una cantidad copiosa de dinero y por el contrario, si funcionaba, todos contentos. Bueno, bonito y barato. En la cuna del emprendimiento, que es Estados Unidos, este modelo ha funcionado muy bien catapultando algunos proyectos a base de decenas o centenas de miles de inversores, cada uno aportando unos pocos dólares a cambio de un producto o servicio, normalmente interesante y pionero en el mercado. Yo mismo participé hace unos años aportando $85 USD al lanzamiento de este interesante producto en Estados Unidos.

Pues como esto estaba empezando a funcionar en España, el [des]gobierno parece que planea joderlo. La idea es también sencilla: Si esto funciona como Dios manda, se le acaba la posición de abuso a mis amigos los banqueros y no pueden seguir quedándose con las casas de los prójimos, así que vamos a «regularlo» para poner las cosas un poco más difíciles todavía al currito de turno. Y yo traduzco lo que supongo que piensan los políticos: como hemos jodido por completo el acceso a la financiación de los emprendedores y micro-empresarios, y el propio mercado ha encontrado la manera de sobreponerse a estas zancadillas, que nosotros hemos creado con la inestimable ayuda de nuestros amos, los banqueros, tenemos que destruir la salida que han encontrado mediante el crowdfunding y seguir castigando el emprendimiento, las buenas ideas y las ganas de hacer algo.

Entre otras cosas, lo que el [des]gobierno planea es que las plataformas de crowdfunding, que son simplemente unas webs en la que se reúnen emprendedores e inversores en potencia, tengan que registrarse en el Banco de España, en la CNMV, tener un capital social de al menos 50.000€ y/o un seguro de responsabilidad civil de 150.000€. Vamos, que como es de esperar, y como quien no quiere la cosa, el Banco Santander, el BBVA y el Sabadell imagino que se van a convertir -en breve- en las únicas plataformas de crowdfunding legales en España. Una vergüenza -para los que aún tenemos cierto sentido de la vergüenza, claro.

Nuestra mediocre sociedad con sus mediocres cretinos que la gobiernan a la cabeza jamás contará con un Mark Zuckerberg que creó Facebook desde su habitación del internado de la facultad, jamás tendrá un Steve Jobs, que creó Apple desde un garaje Californiano, jamás verá a un Bill Gates que creó Microsoft desde un despachito alquilado en Alburquerque en Nuevo México, jamás permitirá que un Larry Page y un Sergey Brin, estudiantes de doctorado, creen Google… No sigo que me deprimo.

Cuando lo lógico sería analizar la regulación que existe en el país de origen de este modelo empresarial, estudiar los magníficos resultados que allí se consiguen y liderar un proyecto similar en España fomentando la creación de proyectos y la inversión privada, aquí hacemos justamente lo contrario. Obviamos todo aquello que hace que el sistema funcione, creamos unas reglas que dificulten el modelo y jodemos, una vez más, algo que funcionaba.

Creo que se estima que en 2013, se invirtieron en España en modelos de crowdfunding alrededor de 10 millones de euros. A ver cuanto se invierte una vez se apruebe esta ley que, entre otras cosas, limita inversiones máximas por persona en proyecto (3.000€) y al año en general (6.000€). Debemos ser el único país de idiotas que limita las cantidades que la inversión privada puede realizar en proyectos empresariales privados. ¿No es curioso que este gobierno de derechas cercene la libertad de inversión en proyectos privados? De verdad, que es de chiste. Yo propongo cambiar el nombre de este país a Mediocres, S.A., porque supongo que nadie me negará que nos viene como anillo al dedo.

Invirtiendo con el culo

La verdad sobre el saneamiento de Bankia
La verdad sobre el saneamiento de Bankia

«Oiga, ¿me regala 15.000 millones de euros? -¿Para qué? -Para tirarlos por la alcantarilla. – Vale, firme aquí y pase por caja a recojerlos.»

No veo diferencia alguna entre esta conversación y la que están manteniendo en el gobierno para inyectar (más de) 15.000 millones de euros en Bankia. Fráncamente, no me entra en la cabeza. La última vez que miré, Bankia era una empresa privada que cotizaba en la bolsa y por tanto tiene dueños con nombres y apellidos o con razones sociales. También está sujeta, al menos, a dos reguladores. Vaya por delante que no soy experto en finanzas pero eso no me impide hacer cuentas básicas. La primera que hago es preguntarme si tiene sentido inyectar 15.000 millones de euros en una empresa cuyo vayor es, según su página web, 3.130 millones de euros. De entrada, algo no me cuadra aquí. Pero sigo leyendo su información bursátil y me quedo en estado semi-catatónico cuando compruebo que el beneficio por acción es de 20 céntimos. ¿Quiere esto decir que van a inyectar 15.000 millones de euros de dinero público en una empresa que paga dividendos a sus accionistas privados? El Santander ganó en 2011 unos 5.500 millones de euros y repartió 60 céntimos por acción. Por favor que alguien me clare este silogismo porque yo no lo entiendo.

Pero olvidémonos de Bankia por un momento y centrémonos en los 15.000 millones de euros. ¿De verdad no hay una mejor forma de invertir 15.000 millones de euros de dinero público? Esperen, déjenme dar antes un paso atrás. Cenamos cada día con las noticias sobre la subasta de deuda pública y la prima de riesgo. En cristiano, asistimos al encarecimiento de nuestra deuda debido a que con buen criterio los Alemanes no quieren hacerse responsables subsidiarios de ella. Son Alemanes, no gilipollas. Entonces, ¿quiere esto decir que no tenemos los 15.000 millones de euros que pretenden inyectar en Bankia y por tanto tenemos que pedirlos prestados a un alto interés para regalárselos a esta empresa privada? Será que con los años me vuelvo cada vez más tonto, porque la verdad, tampoco entiendo esto. Yo siempre pensé que para regalar algo la premisa principal consistía en ser poseedor del bien a regalar primero.

Ahora si, veamos que se puede hacer con 15.000 millones de euros. Pienso en voz alta… 5 millones de parados. Sueldo medio en españa en torno a los 1.200 euros. Seguros sociales de ese sueldo en torno a 480 euros. Con 15.000 millones de euros se podrían pagar los seguros sociales de los parados. Se podría incentivar la contratación de personas en paro, eximiendo a las empresas de la obligación de cotizar por ellos y asumiendo el estado el coste. Si el sector privado contratase a los cinco millones de parados, con los 15.000 millones de euros podríamos pagar 6 meses de seguros sociales de todos ellos. Si se contratasen a la mitad de los parados, podríamos pagar un año. Si se contratase a 1 millón de parados, podríamos pagar sus seguros sociales durante más de dos años y medio. No me parece mala medida para revitalizar el mercado laboral. Con 15.000 millones de euros se puede pagar el sueldo y los seguros sociales de 1 millón de trabajadores durante nueve meses. Tampoco sería mala medida para reactivar el mercado laboral.

Hoy me siento Irlandés. Debe ser porque la principal aerolínea que opera en España es Ryanair, que cuenta con una flota de 275 aviones Boeing 737-800 a nivel mundial. Cada uno de ellos vale nuevo, a fecha de hoy, unos 67,3 millones de euros. Con 15.000 millones de euros se pueden comprar unos 220 Boeing 737-800. Igual el Estado Español podría crear una aerolínea pública que le hiciera frente a nivel mundial a Ryanair dado que Iberia, con sus 158 aeronaves incluyendo las de Air Nostrum, no es capaz de hacerlo en el mercado nacional. Quizás Iberia debió hacer caso en su momento a la comisión técnica que recomendó la compra de los Boeing 737 en lugar de hacer caso a los políticos euroestúpidos y comprar los Airbus 320. ¿Quién sabe si la situación hoy sería la misma?

Con 15.000 millones de euros también se puede investigar mucho. ¿Cuanto? Veamos… Hablo en sueldos anuales: Supongamos un Jefe de Proyecto a medio millón de euros. 5 Jefes de Sección a 300.000 euros. 20 Jefes de equipo a 150.000 euros y 200 investigadores a 60.000 euros. Qué bien pago, ¿eh? Todo un completo equipo de investigación compuesto por 226 científicos con un coste salarial anual de 17 millones de euros. Añadimos seguros sociales y tenemos un coste de personal de 23,8 millones de euros. Me he levantado generoso. Vamos a redondear a 30 millones de euros para incluir costes de operación y ayudantes, celadores, administrativos, conserjes, etc. Es asombroso lo que cunde el dinero cuando no se pule en coches oficiales, comidas con los sindicatos, putas y cocaina. Bien. Dotemos a los investigadores de medios: un edificio para albergar el centro de investigación por 100 millones de euros, un completo lote de equipamiento y material para investigar por 1.000 millones de euros y, voilá, por un coste de 1.500 millones de euros tenemos un complejo de I+D+i en funcionando durante más de 13 años. Con 15.000 millones, podríamos tener 10 de estos centros repartidos por España. Se crearían más de 3.000 puestos de trabajo directos y sólo Dios sabe cuantos indirectos derivados de los descubrimientos y avances que en ellos se produjese. ¿No parece esto mejor idea que inyectar los 15.000 millones en Bankia? A mi, desde luego, si.

Pero si lo que el Estado Español quiere es jugar a ser inversor bursátil generando deuda cara al conjunto de los españoles, se me ocurren apuestas más seguras que Bankia. A bote pronto, analicemos Apple. Si mis cálculos no fallan, Apple vale en bolsa aproximadamente 400.000 millones de euros. Con los 15.000 millones que vamos a enterrar en Bankia, podríamos comprar el 3% de Apple y convertirnos en accionistas de referencia . ¿Qué sería más rentable? Apple-Bankia, Bankia-Apple… mmmmmmm…. tengo que meditarlo…

La vida después del iPhone

HTC Titan
HTC Titan

Ha pasado Papa Noël por mi barrio y se ha dejado olvidado en mi despacho un HTC Titan con Windows Phone 7.5 Mango. En realidad, Papa Noël había rescatado del cajón de los denigrados un HTC 7 Mozart con Windows Phone 7 para mi hijo Pablo, pero cuando se puso a resetearlo y ponerlo al día descubrió con cierto asombro que se actualizaba el solito a Windows Phone 7.5 Mango y tuvo que echarle un ratillo para comprobar, de primera mano, las virtudes de la tan cacareada actualización del sistema operativo de Microsoft para móviles. Ha bastado media hora de uso del Mozart mientras lo configuraba y jugueteaba un poco para que Papa Noël saliese corriendo al Corte Inglés (que afortunadamente estaba abierto ayer, festivo en Andalucía) y me trajese, con cierto retraso, un HTC Titan que ha enviado al iPhone 4 en su embalaje original al cajón de los denigrados a hacer compañía al iPhone 4S sin estrenar. ¡No hay nada como un regalo que uno realmente quiere! ¡Gracias Papa Noël!

De dimensiones «titánicas» pero más fino y agradable al tacto que la mayoría de los smartphones en el mercado, incluyendo los iPhone, el Titan tiene una pantalla Gorilla Glass Super LCD capacitativa de 4’7 pulgadas prácticamente libre de marco, tan espectacular como agradable de usar. Es inmensa! En esta pantalla si se puede leer el periódico con cierta normalidad y ver un video decentemente, incluso a plena luz del día (al menos del nublado día de ayer, veremos que pasa cuando llegue el sol). El teléfono tiene un procesador de un sólo núcleo a 1,5 Ghz, lo que lo coloca en teoría detrás del iPhone 4S y de los últimos smartphones con Android. Sin embargo, Windows Phone es más ligero y se mueve con más fluidez que los demás, incluso con un hardware a priori inferior. Ya lo había leído, pero ahora doy fe de ello. El interfaz del sistema operativo, heredado de Zune, es espectacular y cualquiera que lo use un rato tendrá serios problemas para volver al iPhone y no digamos a Android. Está no uno, sino varios pasos por delante en cuanto a experiencia de uso.

Las características técnicas del Titan están en línea con el resto de smartphones de última generación: Cámaras de 8 y 1,5 MP respectivamente, GPS, Bluetooth, Radio, grabación de video en HD (720p), HDSPA, Wi-Fi, etc. Pero su usabilidad, gracias al sistema operativo, está por encima del resto. Windows Phone organiza la información de una forma mucho más lógica de lo que hemos visto hasta ahora. Los primeros minutos de uso son un poco desconcertantes porque tendemos a buscar una aplicación para cada cosa que queremos hacer. Windows Phone agrupa las funciones en Hubs (ver ejemplos de hubs al final del Post). De este modo, en el Hub «Contactos» tengo, de manera automática, mis contactos personales de Outlook, mis contactos profesionales de Exchange Server, mis contactos de Hotmail, Gmail, Facebook, xBox Live y también los de LinkedIn. Yo no uso Twitter, pero intuyo que si lo usara también aparecerían aquí los hilos que siguiese porque existe una opción, nativa del sistema operativo, para agregar una cuenta de Twitter. En un sólo «Hub» tengo a todo el mundo. Pero no sólo tengo su información de contacto, también tengo sus últimas publicaciones en las redes sociales, fotos, videos, etc. y, además, puedo organizar la información de distintas maneras, todas ellas muy intuitivas y lógicas.

Este agrupamiento de funciones, que a priori no parece tan espectacular, es una forma más sencilla, rápida y eficicaz de usar el teléfono. De ahí que, una vez asimilado el concepto, cueste volver atrás. De hecho, Windows Phone 7 ya agrupaba así las funciones pero cuando lo probé con el HTC Mozart originalmente existían varios problemas menores y un problema mayor: no existía WhatssApp para Windows! Afortunadamente, los windows-dolares de Redmond han debido seducir a alguien porque la primera aplicación que nos ofrece el Marketplace, de manera gratuita, es WhatsApp, y yo no creo en las coincidencias. Claro que todavía hay «pocas» aplicaciones para Windows Phone, pero yo considero que las necesarias, las que se usan a diario, ya están, y el resto son mera morralla que nos hemos acostumbrado a llevar de viaje con nosotros a todas partes. Baste echar un vistazo a MarketPlace para comprobar que Microsoft, por su cuenta, ha desarrollado las aplicaciones más comunes en caso de que la competencia estuviese tentada de no desarrollar las suyas. De manera que no hay una aplicación YouTube de Google pero si hay uno (muy bueno por cierto) de Microsoft e incluso otro mejor de un tercero.

Windows Phone 7.5 vs iPhone 4S
Windows Phone vs iPhone

Otra característica que hace de Windows Phone un sistema operativo más avanzado que el resto es la gestión del correo electrónico. Por fin alguien se ha dado cuenta que era necesario que el sistema operativo (o en este caso Outlook Mobile) crease una carpeta de «correo sin leer» de manera dinámica, para que no fuese necesario revisar todas las carpetas en busca de correo. Ni Android ni iOS, hasta donde yo he sabido trastear, incluyen esta característica que es, simplemente, cojonuda.

¿Has pagado alguna vez por una aplicación de la App Store de Apple que luego ha resultado ser un bodrio que no cumplía tus expectativas? Entonces tengo buenas noticias. Las aplicaciones del Marketplace se pueden probar antes de comprar. Esta característica, por si sóla, es un magnífico filtro para que los desarrolladores con cara de hormigón armado no lo tengan tan fácil para sacarnos unos eurillos. He comprobado que, al menos de momento, hay bastante menos porquería en el listado de aplicaciones que en el listado de la App Store.

Otras consideraciones de interés son la posibilidad de alquilar películas on-line por 0,49€ y de crear una cuenta Zune con 14 días de prueba gratuita en los que se puede bajar música y escuchar cualquier cosa en streaming.

Pero por encima de todo, por fin, un sistema operativo «se lo come todo» y no requiere de un software ortopédico (si, iTunes es una auténtica bazofia) para transferir contenido. El contenido se sincroniza mucho más rápida y fácilmente con Zune para Windows Mobile que con iTunes para iOS y, además, de momento no me he encontrado con ninguna restricción en cuanto al tipo de archivos que se pueden reproducir. Hace años decidí digitalizar todos mis CDs y lo hice en el formato que más se ajustaba a mis requerimientos, que es wma (Archivo de audio de Windows Media) y no MP3. Pues resulta que el iPhone no come wma, pese a que estos archivos son nativos del sistema operativo presente en el 90% de los ordenadores del mundo, así que cada vez que he querido meter uno de mis CDs en el iPhone antes he tenido que convertirlo a un formato distinto, en este caso MP3, lo cual ha sido siempre un coñazo.

Por otro lado, el contenido en la nube es parte integrante del teléfono. No he hecho todavía ninguna foto con este móvil pero sin embargo, si entro en mi galería, tengo cientos de ellas. Windows las ha sacado de Facebook y Live! y las ha puesto allí. En realidad, no las ha puesto (no me ha llenado la memoria de fotos que yo no he pedido). Me ha puesto unas miniaturas y, si las toco, se las descarga sobre la marcha y puedo verlas en su resolución original. Además, Office comparte los documentos con el PC de manera automática con SkyDrive, al igual que las fotos que hagas, que viene a ser una versión de iCloud que resulta fácil de usar y funciona.

No quiero hacer de este post un artículo técnico. Si te interesa una buena prueba del Titan, esta es la mejor de las que he leído y visto, que han sido bastantes. Soy impulsivo en mis compras, pero no estúpido. Mi intención era dar fe de que se puede jubilar al iPhone y la vida sigue. De hecho, la vida sigue con un teléfono mejor, más rápido, más sencillo, más potente e infinitamente más atractivo. Eso si, se pierde el «aura» de Apple en el camino. Bueno, a mí siempre me ha venido grande…

Algunos hubs de Windows Phone
Algunos hubs de Windows Phone

Leer para creer

Steve Jobs: La Biografía
Steve Jobs: La Biografía

La lectura compulsiva es una disfunción que me sobreviene cada cierto tiempo. A veces leo sólo 3 o 4 libros en un año y, otras veces, leo más de 40. Cuando entro en racha leo de media más de uno a la semana y sin embargo, hay períodos en los que un libro me dura más de seis meses. He intentado analizar objetivamente los factores que se dan para que entre en fase de lectura compulsiva o por el contrario caiga en el letargo literario. He analizado los factores típicos como estrés, trabajo, relaciones, problemas, economía familiar, etc. y no he conseguido deducir a qué se debe uno u otro estado.

El caso es que llevaba meses estancado con tres libros empezados y no me apetecía acabar ninguno, así que no estaba leyendo nada salvo los periódicos por la mañana. A fuerza de ver publicitada la biografía de Steve Jobs por todas partes, he acabado picando y me la he comprado. Hace ya más de dos años que no compro un sólo libro en papel. Desde que tengo el Kindle todo lo que he comprado ha sido en formato digital por dos motivos: primero, por su inmediatez -lo quiero ahora, lo pago ahora, lo tengo ahora- y segundo, porque es más barato y no se puede prestar y por tanto yo ahorro y a mis amigos les ahorro el tremendo esfuerzo de acordarse de devolver un libro prestado.

El libro me lo he devorado; merece la pena. Para quién no conozca la tecnología whispernet, es uno de los mejores inventos de los últimos años. Yo tengo un Kindle en mi mesita de noche, y cuando no me duermo antes de poner la cabeza en la almohada, leo algunas páginas antes de visitar a Morfeo. Para los que no hayan oído hablar de él, el Kindle es el libro electrónico de Amazon. En el iPhone tengo el software Kindle para iPhone. El el PC del despacho y en el de la oficina tengo el software Kindle para Windows. En el portátil tengo el software Kindle para OS X y en el iPad el Kindle para iPad. En el Galaxy Tab tengo Kindle para Android, que cuiosamente es uno de los mejor conseguidos. Lo que hace Whispernet es sincronizar el libro en todos mis dispositivos, de manera que cuando acabo de leer en cualquiera de ellos, la página por la que voy se actualiza automáticamente en los demás aparatos y puedo seguir leyendo por donde iba en cualquiera de ellos sin tener que buscar la página o el párrafo concreto. De este modo, cuando un libro gusta, como ha sido este caso, lo puedes leer en un par de días a base de minutos muertos aquí y allá, siempre que lleves algún dispositivo encima, lo cual no parece sea un problema para nadie hoy en día.

En cuanto al libro, sin llegar a la altura de The Road Ahead, la primera parte de la biografía de Bill Gates, publicada a mediados de los 90, está bien escrito y es entretenido. Debo decir que me sorprende que haya pasado la censura del propio Jobs antes de morir porque, en ocasiones, el autor no lo pone especialmente bien en algunos aspectos de su vida, como por ejemplo en la higiene personal. Con ese aura que siempre se daba de persona sencilla y bien arreglada (Levi’s 501, polo negro de cuello vuelto de Issey Miyake y zapatillas deportivas Nike -antes New Balance) hay que leer para creer que fuese difícil convencerle de que se duchase más de una vez por semana.